Historia del foro

A Totally Diferent Twilight...

¿Jasper y Bella Vulturi?¿Alice y Edward humanos?¿Emmett y Rosalie nómadas huyendo de los Vulturi?¿Edward,Bella y Jasper siendo unos pícaros rompecorazones?

Isabella Swan, era la chica perfecta. Nació en Forks, Washington, el lugar más húmedo, lluvioso y nublado que alguien pudiera conocer. A ella le fascinaba su pequeño pueblo, el olor a tierra húmeda, el verdor por doquier, la neblina que le daba un toque tétrico pero mágico al lugar. Ahí ella vivía en una modesta casa en una familia de clase media. Todos se conocían en Forks, era un pueblo tan pequeño que a cualquiera que veías pasar por la calle lo conocías y todos los ciudadanos te podrían decir que, no había pareja más adorable que el matrimonio Swan. Era una pareja muy joven sin duda, se casaron a tan sólo 18 años de edad por parte de la madre, Reneé y 19 por parte de Charles, quien todo mundo llamaba Charlie. A pesar de todo eran muy felices, siempre los verías riendo, compartiendo una mirada cálida, un beso, secretos. Al año de matrimonio ellos habían concebido una hija, a la que decidieron llamar Isabella, aunque siempre ella pedía que la llamaran Bella, pues odiaba su nombre completo. Y si antes la familia Swan era adorable, con la llegada de Bella a sus vidas se podría jurar que eran la familia más envidiada del mundo. Charlie y Reneé eran los padres más devotos y dedicados. Siempre jugaban con la pequeña Bella, pues ella era muy traviesa y un verdadero diablillo, nadie podía recistirce o negarlo algo a la princesa de la casa, que los hipnotizaba con sus profundos ojos color chocolate, iguales a los de su padre. La familia Swan era muy unida a la familia Black. Billy Black y Charlie Swan eran los mejores amigos, siempre reuniéndose sus típicos fines de semana para ver los deportes, gritando frente al televisor, mientras las esposas Rebecca y Reneé platicaban cómodamente tomando un café y después hacían la cena. Mientras tanto, los pequeños, Jacob y Bella jugueteaban y reían en el jardín chapoteando en los charcos y haciendo pasteles de lodo, para después recibir fuertes reprimendas de sus madres, pero al final no importaba, porque ellos se tenían el uno al otro y no les importaba recibir castigos con tal de seguir jugando. Sí, todo parecía perfecto, los chicos crecieron y pronto cumplieron 16 y 17 años, siendo Bella la mayor, estando ya en la preparatoria de Forks, por desgracia su mejor amigo Jake entró a la preparatoria de la reserva, pero siempre se procuraban ver seguido.

Una tarde Bella tomó su roído ejemplar de Cumbres Borrascosas y se dirigió al bosque. Jamás pensó que ese viaje cambiaría su vida para siempre. Oscureció, ella se había perdido y la lluvia comenzó a caer, corrió tratando de buscar una salida cuando de pronto cayó en una trampa para osos, haciendo que el infernal aparato cerrara en su pierna, gritó de dolor y miedo, pero nadie la escuchaba, la sangre y su olor comenzaron a nublar sus sentidos haciendo que callera en la inconsciencia. Lo último que recuerda haber visto era un chico, de cabello oscuro y capa negra tomar su pierna y succionar toda la sangre que escurría de esta. Cuando despertó todo era completamente distinto, no recordaba nada, solo recordaba que antes estaba en el infierno, la habían metido en grandes llamas de fuego y se había sentido pesada, sólo recordaba eso y su primer nombre Isabella. Estaba en un cuarto extraño, parecía elegante, lleno de obras de arte y tapiz que parecía caro. Pero todo lo veía tan... distinto, tan claro. Fue como si hubiera sido miope toda su vida y de repente le hubieran colocado las mejores gafas. Todo lo que tocaba lo rompía por error y cuando se vio en el espejo casi desmaya si hubiera podido. Era hermosa, más que hermosa, era perfecta. Era pálida, piel de porcelana, cabello oscuro en tirabuzones caía por su espalda, delgada y de labios rellenos, pero lo más desconcertante eran esos ojos rojos color sangre. Era un vampiro y no cualquier vampiro, ahora era una Vulturi.

Aro, jefe de la realeza vampírica estaba fascinado con su nuevo ejemplar. Una nueva neófita llamada Isabella. Ella era diferente a las demás, pronto descubrieron que poseía un don, un don muy poderoso. Era capaz de crear un campo protector y envolver en ellos a quien quisiese proteger. Ella podía durar sin beber grandes extensiones de tiempo, incluso más que vampiros más antiguos y experimentados que ella. La hizo su favorita y le mostró lo que eran las maravillas del poder. La convirtió en una máquina para matar, una guerrera a sangre fría, algo egoísta y arrogante. Muy independiente, solo vivía para servir a su maestro, Aro. Era una vampira muy atrayente, con ese aire y sonrisa pícara que siempre poseía, se hizo la mano derecha de Aro, casi su hija. Bella sentía que encajaba ahí, no tardó en hacer amigos, pronto conoció a Jasper Vulturi, un viejo miembro de la guardia encargado de entrenar novatos, uno de los guerreros más fuertes debido a las guerras de neófitos en las que participó en los 1800s, su don, la manipulación de emociones hacía todo más fácil, haciéndolo a él otro favorito de Aro. Él era muy parecido a Bella, pícaro, asesino de sangre fría, con el único que mostraba su sentimientos era con Bella.

Años después, Jasper y Bella fueron asignados a una misión. Buscar a los nómadas Emmet y Rosalie, los Vulturis los han estado buscando por casi un siglo. En la época humana de Rosalie, Cayo, hermano de Aro, andaba rondando por Rochester, su ciudad, debido a una misión urgente que estaba forzado a solucionar él mismo. Cayo tenía sed, mucha sed así que no dudo en darle caza a la primera víctima con quien se topase que por desgracia, fue ella, y Cayo no solo se quería conformar con su sangre, al verla bien, a la luz de la luna y ver su belleza, quiso divertirse un rato, violarla y luego beber de ella. Cuando estaba a punto de lograr su cometido llegó su salvador, Emmet, quien con su gran fuerza lo mató pero Rosalie ya había sido mordida, era muy tarde. Ya convertida y pasándole el tiempo ambos se hicieron pareja y tuvieron que pasar años huyendo, pues no dudaban que los Vulturis los harían pagar y no estaban equivocados. Hace poco ellos habían sido localizados en Washington, muy cerca del lugar nativo de Bella. Su misión era dar con ellos y traerlos a Volterra, además de un encargo extra , personal por parte de Aro, visitar a Carlisle Cullen y decirle sus ardientes deseos por verlo pronto.

Aro tenía un muy viejo "amigo", su nombre era Carlisle Cullen. Un vampiro conocido por su bondad, paciencia y su peculiar dieta vegetariana y el autocontrol más grande que cualquier otro vampiro. Entre los humanos es un reconocido doctor, era codiciado por muchas enfermeras del hospital de Forks, donde él vivía, pero ninguna de ellas alguna vez le atrajo, hasta que la conoció a ella. Esme era una dama muy joven, y llegó a la sala de emergencias del hospital debido a un maltrato que había puesto en peligro su vida y la que llevaba en el vientre, todo causado por su esposo. Carlisle hizo todo lo posible, pero no pudo salvar al niño, la madre, aunque algo débil, logró sobrevivir. Pero sin su bebé, ya nada le importaba. Escapó del hospital una noche lluviosa y se fue al puente, donde se tiró esperando quitarse la vida, obviamente Carlisle no podía permitirlo, la amaba, no podía dejarla ir por más egoísta que fuese, así que tomó el riesgo y la mordió. Esme ahora es una neófita y poco a poco se fue recuperando de su depresión, Carlisle la sacaba adelante, hasta que ellos ya estaban perdidamente enamorados y decidieron casarse. Un año después de su matrimonio, la joven pareja salió de caza, el olor a sangre y un llanto desgarrador los puso alertas. Carlisle le pidió a Esme que esperara, pues aún no podía controlar su sed muy bien y fue a la fuente del desastre. Eran 2 niños, unos pequeños de no más de 8 años. Era una pequeña niña que lloraba al lado de un cuerpo inconsciente, al parecer de su hermano. Carlisle y Esme los salvaron y los llevaron a casa, donde los convirtieron en Cullens.

Alice y Edward Masen eran mellizos. Pero no simples mellizos, algo sobrenatural los rodeaba, ambos poseían dones, raros desde que tenían memoria. La pequeña tenía visiones del futuro, mientras el otro escuchaba voces, que pronto comprendió eran los pensamientos de los demás. Sus padres los abandonaron, eran unos jóvenes alcohólicos y drogadictos, por lo que por orden de un juez fueron dejados en un orfanato. Ellos odiaban ese lugar, donde los maestros maltrataban a los niños y los hacían ladrones, esclavos así que decidieron huir de ahí. Alice tuvo una visión, un hombre de ojos rojos la veía dormir por las noches, la seguía por donde iba y como eran niños ingenuos decidieron informar a las autoridades. Obviamente no les creyeron nada y enviaron a Alice a un loquero, Edward por orden de su hermana huyó, intentando hacer un plan para sacarla de ahí. Para James la sangre de Alice cantaba, era el momento perfecto de atacar, así que no dudó en colarse en la habitación de Alice y atacarla, lo que él no sabía era que su enfermero era un vampiro también éste la salvó dando su vida a cambio, Alice corrió y buscó a su hermano, quienes rápido huyeron de nuevo. Caminaron y caminaron, tenían hambre, frío y miedo. No sabían si James seguía vivo o no. Edward estaba lastimado, corriendo se rompió un pie y se cortó haciendo que sangrara. Trató de seguir caminando, por su hermana, por los dos, pero no pudo más y se desmayó. Si Esme y Carlisle no hubieran llegado, lo más seguro es que estuviesen muertos.

Ya han pasado los años, la misión a iniciado y para todos solo hay un destino: Forks. Carlisle ha acogido a Emmet y Rosalie, dispuestos a darles asilo durante un tiempo después de haber oído su historia. Jasper y Bella llegan a Forks, como unos estudiantes de intercambio al instituto, al conocer a los chicos Cullen nuevos sentimientos empiezan a surgir...


¿Qué pasará con Bella al llegar a su viejo hogar?

¿Podrán Jasper y Bella cumplir con su misión o caeran en las redes del amor? ¿Rosalie y Emmet lograrán huir de su destino?

¿James en verdad ha muerto?

¿Qué harán los Vulturis con todo lo que pasa?